Resumen del libro
El arbitraje estatutario es un instrumento útil por diversas razones. Por un lado, desde la perspectiva de los sujetos implicados en el litigio −socios y sociedad−, el arbitraje puede ofrecer celeridad, especialización, confidencialidad y flexibilidad en la resolución de litigios. Por otro lado, desde la perspectiva del Estado y, por tanto, del interés general, su uso permite reducir la carga de trabajo de los órganos jurisdiccionales y trasladar a las compañías los costes de la resolución de este tipo de conflictos. Quizás por estos motivos, el legislador de 2011 optó por introducir los arts. 11 bis y 11 ter LA con el noble propósito −declarado en el preámbulo de la reforma− de “brindar seguridad jurídica” y, por tanto, generar confianza para que los operadores del tráfico pudieran confiar en este mecanismo de resolución de conflictos. Sin embargo, lo cierto es que más de una década después de su aprobación, parece que el arbitraje estatutario no ha desarrollado todo su potencial.
Son varios los factores que pueden explicar esta circunstancia. Se podría hablar de la falta de cultura arbitral en España, de los elevados costes del arbitraje en comparación con el proceso jurisdiccional o, incluso, del buen hacer de los juzgados de lo mercantil. No obstante, más allá de estos factores, una de las principales causas que justifica su escaso uso es el de su deficiente regulación. La regulación del arbitraje estatutario, como se analiza en la obra, es insuficiente, confusa y, además, cuestionable desde el punto de vista constitucional. Lo que ha favorecido que los operadores jurídicos no confíen plenamente en el arbitraje como método de resolución de conflictos societarios.
Partiendo de esta premisa, en la presente obra, y desde un prisma procesal, el autor lleva a cabo un ejercicio de interpretación, sistematización y crítica con el que pretende arrojar algo luz sobre muchos de los interrogantes que presenta el arbitraje estatutario.
CAPÍTULO PRIMERO. INTRODUCCIÓN
I. Antecedentes
II. Concepto de arbitraje estatutario
III. El arbitraje en España: una breve contextualización
CAPÍTULO SEGUNDO. CLÁUSULA ARBITRAL ESTATUTARIA
I. Convenio arbitral: antecedentes y regulación actual
II. Cláusula arbitral estatutaria: consideraciones generales
III. Incorporación, supresión y modificación de la cláusula arbitral estatutaria
IV. Contenido de la cláusula arbitral estatutaria
V. Forma e inscripción de la cláusula arbitral estatutaria
VI. Alcance subjetivo de la cláusula arbitral estatutaria
VII. Alcance objetivo de la cláusula arbitral estatutaria
VIII. Efectos de la cláusula arbitral estatutaria
IX. Incidencia del concurso de acreedores sobre la cláusula arbitral estatutaria
X. Otras cláusulas estatutarias de resolución de conflictos
CAPÍTULO TERCERO. EVENTUAL COLISIÓN DE LA CLÁUSULA ARBITRAL ESTATUTARIA CON EL DERECHO A LA TUTELA JUDICIAL EFECTIVA
I. Planteamiento
II. Autonomía de la voluntad como fundamento del arbitraje: la doctrina del Tribunal Constitucional sobre el arbitraje obligatorio
III. Constitucionalidad del art. 11 bis 2 LA
IV. Alternativas constitucionalmente viables
CAPÍTULO CUARTO. OBJETO DEL ARBITRAJE ESTATUTARIO
I. Planteamiento
II. Objeto de arbitraje
III. La arbitrabilidad como límite del arbitraje estatutario
IV. Análisis particular de algunos conflictos sociales
V. El tratamiento arbitral y procesal de la inarbitrabilidad
CAPÍTULO QUINTO. LA IMPUGNACIÓN ARBITRAL DE ACUERDOS SOCIALES COMO PARADIGMA DEL ARBITRAJE ESTATUTARIO
I. Planteamiento
II. Los acuerdos sociales y su impugnación: consideraciones generales
III. Las partes en la impugnación arbitral de acuerdos sociales
IV. Constitución del órgano arbitral
V. Medidas cautelares y preparación del arbitraje
VI. Particularidades procedimentales
VII. Efectos del laudo
CAPÍTULO SEXTO. CONSIDERACIONES FINALES
I. La cláusula arbitral inserta en los estatutos de una sociedad de capital es una cláusula auténtica
estatutaria
II. La declaración del concurso de acreedores no afecta per se a la cláusula arbitral estatutaria
III. El principio mayoritario es incompatible con el carácter consensual de la cláusula arbitral
IV. El art. 11 bis 2 en su redacción actual es inconstitucional
V. Las cláusulas escalonadas de resolución de conflictos societarios van a suponer una nueva etapa en la evolución del arbitraje estatutario
VI. La pretensión arbitral es un elemento esencial del arbitraje estatutario
VII. La regulación de expedientes de jurisdicción voluntaria en materia de derecho de sociedades no afecta al arbitraje estatutario
VIII. El carácter arbitrable de la pretensión viene determinado por la posibilidad de las partes de obtener la consecuencia jurídica solicitada sin la intervención de un juez
IX. Las pretensiones planteadas al amparo del derecho de sociedades son arbitrables
X. El litisconsorcio cuasinecesario del art. 222. 3 LEC también se aplica en el arbitraje bajo ciertas condiciones que deberán ser aclaradas por la ley
XI. El art. 11 bis 3 incorpora una garantía que trata de garantizar el principio de igualdad de las partes en el nombramiento de los árbitros
XII. No se debe exigir el auxilio judicial para la inscripción en el registro mercantil del laudo que acuerda la suspensión cautelar del acuerdo social y/o la anotación preventiva de la demanda
XIII. La presencia de terceros legitimados para impugnar acuerdos sociales tiene difícil encaje en el arbitraje
XIV. Estado general del arbitraje estatutario y propuestas de mejora
BIBLIOGRAFÍA